Abedules

La vida es un reguero,
que va escurriendo
de un nevero blanco.
Parece que se va deshilachando lentamente,
pero salta y corre y lo deja todo atrás,
siempre condenado a ir hacia el valle.
Observa a los abedules en su atalaya.
Son los únicos que soportan el viento del norte,
los mas altaneros de todos.
Pero no comprende su belleza, ni su resistencia.
Su desolación, y su soledad blanca y fría.
Aún así memoriza su color, su forma, sus hojas...
El reguero llega  al valle,
y se une con otros arroyos.
Mas tarde llega a ser un río
con un caudal de piedra y tiempo.
Y por fin lo entiende todo.
Comprende la resistencia y la sobriedad
La risa y el llanto, las palabras que se dicen,
y las que nunca llegan a pronunciarse.
Todo lo que ha vivido, se muestra claro, de repente.
Se acuerda de los abedules.
Nieva y nieva...  blanca corteza de abedules.